El fin de semana, por caso, pasaron la noche juntos y luego él la llevo al aeropuerto, por un viaje de trabajo. Si eso no es amor…
La Blackberry de Paula ardía. Así empezó todo. Es decir, el tema del reencuentro. “Extrañar me da pilas, me da más ganas de estar juntos. Además, sirve para darnos cuenta de que es lo que queremos”, decía ella un mes antes de que explotara la ruptura, tal vez de un modo profético sobre lo que sucedería luego. Por que, efectivamente, fue eso lo que pasó. Extrañarse y darse un espacio solos les permitió darse cuenta de lo que realmente buscaban el uno del otro ¿volverse a elegir? ¿Estar juntos de nuevo?. Por lo pronto, digamos que tras casi dos mesesprácticamente separados, Paula Chaves y Pedro Alfonso se están reencontrando, y que entre ellos está naciendo un segundo capítulo en su historia de amor.
Y todo fue, ya lo adelantamos, a partir de un chatcasi constante entre dos Blackberry –la de ella y la de él- que los chicos supieron mantener a pesar de la distancia.
Entonces, Paula se dejó convencer; aceptó la invitación de Peter para tomar algo, y allí nomás se dieron cuenta de que aquello de extrañarse había rendido sus frutos.
Antes, recordemos los últimos capítulos de este romance que se gestó bajo las luces de Bailando por un sueño.
Porque finalizado el certamen más popular de la televisión, mostrando a Peter y Paula muy cerca y ¿enamorados?, ellos casi no se volvieron a ver. La vorágine del éxito los envolvió también en una trampa de distancia. Las presentaciones –de él- en boliches, los múltiples y renovados compromisos –de ella- e la pasarela, parecían hacer imposible el hecho mas simple que precisa un amor para teñirse de real: que ambos pudieran coincidir. A su vez, a Paula no le fue sencillo adaptarse a su flamante perfil popular, resabio de su paso por el programa de MarceloTinelli, de donde egresó con título de Subcampeona, detrás de La Mole Moli. “Todo lo mediático los superó, y se empezaron a mezclare mucho la realidad y la ficción. Al principio fue divertido, pero luego se puso inmanejable para una relación estable”, acercaron algunos amigos de la producción de La cocina del show, quienes siguieron de cerca los capítulos de este Culebro amoroso de alto rating. Pero esos inconvenientes parecen haber quedado atrás.
EL SABER DEL (RE)ENCUENTRO. La historia de este recomienzo arrancó el martes pasado, cuando sorprendió la presencia de Peter en un bar a sólo dos cuadras del nuevo departamento de la modelo. Es que, aun siendo habitúe del lugar. Peter apareció solo en una mesa, con lentes y gorro negro, típicamente de “incógnito”. Si lo que pretendía era no levantar lapendiz se equivocó, por que logró el efecto exactamente contrario. A los pocos minutos se puso el motivo de tanto “camuflaje”. Si Paula Chaves apareció por el mismo restó y compartió mesa con él. Un rato después, ambos se perdían en el auto del productor rumbo, a la casa de la diosa. Y aunque esquivaron losflashes con mucha astucia. La foto de ellos nuevamente juntos por fin llego.
El domingo 27. Peter pasó nuevamente la noche en la casa de Paula, y poco después del mediodía la llevó –todo un caballero- rumbo al aeropuerto, en donde a ella la esperaba una imagen para salir de viaje de trabajo rumbo a Brasil. Lo que las fotos no lograron retratar es que hubo un escurridizo beso de despedida, que sellaba la esperada reconciliación. Queda entonces por verse cómo seguirá esta segunda vuelta, sin el minuto a minuto del rating velando tras sus besos.
Apenas una semana después de aquel almuerzo, el domingo 27, la modelo llegó de Resistencia, Chaco, donde había asistido para cumplir con sus compromisos laborales. Y, como buen novio, Peter fue al Aeroparque a buscarla. Como el vuelo estaba retrasado decidió subirse al auto y esperarla ahí. Cuando finalmente Paula llegó, partieron hacia el departamento de ella. Dos horas más tarde, cerca de las 18, salieron nuevamente. Pero esta vez lo hicieron rumbo al Aeroparque Internacional de Ezeiza en él auto de ella, un Volkswagen Golf de color negro, que siempre que están juntos él maneja. Tal vez sea parte de la estrategia que establecieron para no mostrarse juntos, que Paula bajó sola del coche y se embarcó junto a una amiga rumbo a Brasil, para asistir a una producción fotográfica.
